Al consumir un cigarrillo se producen dos tipos de corrientes:
- Corriente principal, constituida por el humo que alcanza los pulmones del fumador después de una pipada.
- Corriente secundaria, o lateral, constituida por el humo que se desprende del cono de ignición del cigarrillo, el que escapa a través de los poros del papel del filtro, y el que vuelve a exhalar el fumador después de la pipada. El humo de esta corriente secundaria contamina el aire ambiental que rodea a los fumadores.
Para ayudar a entender los riesgos de la inhalación pasiva del humo de tabaco conviene recordar que el humo de los cigarrillos es una mezcla de casi 5000 sustancias tóxicas.
Algunas de estas sustancias son capaces de producir efectos negativos de índole mutagénica, citotóxica, antigénica o proinflamatoria. La variedad de estos efectos explica la potencial diversidad de las acciones nocivas del tabaco.
El humo del tabaco es inhalado en un 25% por el fumador en la corriente principal, y cambia su composición en los pulmones antes de ser devuelto a la atmósfera. El 75% restante, procedente de la combustión pasiva entre las caladas, también pasa a la atmósfera, es la corriente secundaria o lateral.
Ambas han mostrado la presencia de productos perjudiciales para la salud, como Monóxido de Carbono (CO), nicotina y diversos compuestos con capacidad carcinogenética. Pero en estudios recientes se ha demostrado que la concentración de determinadas sustancias tóxicas es superior en la corriente secundaria, que es la que perjudica al fumador pasivo. No es extraño por tanto que la inhalación continuada del humo del tabaco, aunque sea involuntaria y en pequeñas cantidades, tenga importantes e indeseables consecuencias para la salud.
Un cigarrillo medio de 80 mm produce, aproximadamente, 500 mg de humo.
Los Componentes más Importantes del Humo
La Nicotina
Representa la sustancia más característica del humo del tabaco, al ser la causante directa de dos fenómenos especiales: algunos efectos fisiológicos y, ser la droga causante de la adicción que produce el tabaco.
Absorbida a través de la membrana alveolo capilar, apenas tarda entre 7 y 10 segundos en llegar a los centros cerebrales superiores. La vida media de la nicotina es de 40 minutos, con extremos de 20 a 80 minutos.
La toxicidad de la nicotina como sustancia pura es extraordinaria:
- 2 gotas de nicotina administrada de forma sublingual ocasionan la muerte de un gorrión
- La dosis tóxica aproximada por vía endovenosa en el hombre es del orden de 40-60 mg.
La nicotina es una sustancia que cumple todas las características que definen a las drogas con capacidad adictiva: produce tolerancia, crea dependencia y cuando el sujeto que la consume habitualmente deja de utilizarla se desarrolla un intenso síndrome de abstinencia.
El CO (Monóxido de Carbono)
Se encuentra en el humo de combustión del cigarrillo en un nivel de concentración muy por encima de lo permitido en ambientes industriales, con un alto porcentaje de contaminación. El individuo fumador expone sus capilares pulmonares a niveles de CO de, al menos 400 ppm. La inhalación de CO induce una situación característica:
- Se mezcla con el aire en los alvéolos pulmonares, atraviesa la barrera alveolar y penetra en la sangre desplazando al oxígeno de los hematíes, formándose unidades de Carboxihemoglobina (HbCo). La afinidad de la Hemoglobina por el CO, es 240 veces superior con respecto a la que muestra por el Oxígeno.
El resultado es un déficit orgánico de oxígeno.
El CO es un generador importante de hipoxemia que agrava la isquemia miocárdica. Ha de entenderse esta sustancia junto a los alquitranes y la nicotina, como un producto muy tóxico para el organismo, y cuya concentración en las formas "lights" no ha podido rebajarse.
Los Alquitranes
Son sustancias que se forman durante la combustión del tabaco.
Su importancia radica en que son agentes con acción cancerígena directa e indirecta.
Conclusión
En el humo del tabaco se han descrito hasta 4.500 sustancias, la mayor parte de ellas tóxicas para la salud. Algunas tienen capacidad de producir cáncer, otras causan lesiones irreversibles en el aparato respiratorio, otras tienen efectos irritantes, otra capacidad fibrinogenética, hasta incluso se han detectado sustancias radiactivas.
Las sustancias tóxicas del humo del tabaco con más alta capacidad patológica son: Nicotina (droga causante de la adicción que producen los cigarrillos), monóxido de carbono (gas tóxico responsable de enfermedades cardíacas y vasculares), alquitranes (conjunto de hidrocarburos aromáticos policíclicos productores de cáncer) y sustancias oxidantes (grupo de sustancias tóxicas capaces de producir bronquitis crónica y enfisema pulmonar).
1 comentario:
Interesante!
pd: y justo ayer comence a fumar:(
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